El ministro de Economía, Mario Guillén, aclaró ayer que los notarios de fe pública deben reportar a la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) solo las operaciones de compra y venta de bienes inmuebles superiores a 300.000 dólares.
"Los reportes se deben realizar de las transacciones de aquellos bienes que sean superiores a los 300.000 dólares (...) porque entendemos que en cualquier transacción la gente se puede ver afectada en su confidencialidad", indicó Guillén, en conferencia de prensa.
El miércoles 28 se conoció que hay una disposición que obliga a todos los notarios de fe pública a reportar a la UIF las transacciones por la compra y venta de bienes inmuebles y esta determinación generó una ola de susceptibilidades.
Legisladores del oficialismo y la oposición anunciaron que se convocará a la directora de la UIF, Teresa Morales, y a Guillén para que brinden una explicación sobre esta decisión.