
La Conferencia del Agua de la ONU, la primera cumbre de este tipo en casi medio siglo, arrancó ayer en Nueva York con un llamamiento a actuar urgentemente para, al mismo tiempo, proteger los recursos hídricos y lograr que todo el mundo tenga acceso a agua y saneamiento adecuados.
“Todo lo que necesitamos para vivir una vida decente está vinculado al agua. Nuestra salud, alimentación, seguridad, hábitat, economía, infraestructura y clima”, señaló en el acto de inauguración el rey Guillermo Alejandro de Países Bajos, que junto a Tayikistán preside la reunión.
La cita, que se prolongará hasta el viernes, reúne por primera vez desde 1977 a Gobiernos, empresas y organizaciones civiles para discutir la gestión mundial del agua y se da en un momento de grave crisis por este recurso vital.