Tres muertos y una decena de heridos, de los que uno es un sacerdote y dos son policías, es una tragedia de marca mayor pero todas las informaciones recogidas en el lugar dan cuenta que este pudo ser peor… mucho peor. La caldera de gas de un edificio, ubicado en la céntrica calle Toledo de Madrid, explotó matando a tres personas y destruyendo la parte superior del inmueble.
¿Cómo es que una tragedia de esta naturaleza puede ser vista como un milagro?
Mañana, en nuestra edición impresa, el periodista Juan José Toro le contará lo que pudo recoger en el lugar de los hechos.
Niños y ancianos forman parte de una historia en una Madrid nublada y todavía cubierta de nieve.
En nuestras redes sociales también le ofreceremos galería de fotos y un video exclusivo.
..........
Señor Lector, este es solo un reporte. La información completa está en la edición impresa de El Potosí.