La justicia chilena otorgó ayer la libertad condicional a 568 reos en la región Metropolitana, que se suman a los 724 presos de la región de Valparaíso que el fin de semana recibieron el mismo beneficio, informaron fuentes oficiales.
La Comisión de Libertad Condicional de la Corte de Apelaciones, un ente independiente y autónomo, aprobó en Santiago el 32,1 % de las solicitudes realizadas por los internos y el 90 % en la región de Valparaíso.
Los beneficiados debían tener una conducta intachable, haber cumplido la mitad de la condena, tener un oficio y haber asistido a las escuelas de las cárceles.
La ministra de Justicia, Javiera Blanco, criticó la decisión de la Corte de Apelaciones y dijo que “tener casi 1.300 personas puestas en libertad es como abrir una cárcel”.