
El miércoles 11 de junio, los comunarios “evistas” que bloqueaban la carretera hacia Llallagua habrían utilizado armas de guerra para atacar al grupo de policías que fue a despejar la vía a pedido de la población que estaba aislada y no recibía alimentos ni combustibles.
En contacto telefónico con El Potosí, el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), coronel Walter Sossa, informó que en el punto donde se habría instalado uno de los francotiradores se pudo colectar una vaina servida de fusil calibre 7.62.
Se trataría de una bala de fusil Máuser que es considerado como un arma de guerra altamente letal debido a su potencia y a la precisión que se puede lograr en los disparos.
Esa habría sido el arma que mató al teniente Brayan Barroso Rodríguez, de 22 años, quien recibió el impacto de una distancia aproximada de 200 metros por lo que el proyectol perforó el chaleco antibalas y dañó corazón y pulmones.
La segunda víctima de los francotiradores fue el capitán Daynor Miranda Blanco, quien recibió el impacto de un proyectil de arma de alto poder en el hombro izquierdo.
Walter Sossa indicó que el proyectil disparado desde un punto elevado fue dirigido al corazón del oficial, pero como llevaba un equipo de comunicación en ese lado, la bala impactó allí y se desvió hacia el hombro.
MUERTOS
Los bloqueadores “evistas” también causaron la muerte del teniente Carlos Apata Tola a quien interceptaron en pleno cerro y le golpearon hasta dejarle sin vida. Su certificado médico revela que le aplastaron la cabeza.
La tercera víctima fatal de esa jornada trágica fue el sargento de bomberos de Potosí Jesús Mamani Morales quien también falleció por contusiones fruto de una golpiza propinada por una turba.
El cuarto muerto en la región potosina de Llallagua fue el joven Vladimir Aguilar Choque (18), quien retornaba con su hermano de Huanuni y fue interceptado por los bloqueadores que le acusaron de ser informante de la Policía y le golpearon hasta dejarle con lesiones que le costaron la vida.
FRANCOTIRADORES
La Policía había identificó cuatro puntos desde donde francotiradores dispararon contra oficiales de la institución del orden.