El sector minero de Potosí alcanzó un trágico récord este año, registrando el mayor número de muertes en los últimos tres años. La cifra ha llegado a un alarmante total de 106 mineros fallecidos en accidentes laborales en los socavones, luego de que una joven trabajadora de 21 años perdiera la vida al caer desde una altura de 60 metros en la mina Ollerías.
Este luctuoso episodio suma otro nombre a la larga lista de víctimas que el peligroso trabajo minero ha cobrado en el Cerro Rico de Potosí y en otros yacimientos mineros.
Entre los fallecidos de este año, seis son mujeres y dos son menores de edad, mientras que el resto son varones mayores. En este último incidente se evidencia el impacto que la falta de seguridad en las minas sigue siendo el factor de los decesos de trabajadores mineros.
"La pérdida de una vida tan joven nos recuerda los peligros que enfrentan a diario los mineros", lamentó el coronel Marco Antonio Dávalos, director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc).