La falta de agua asociado al fuerte frío reinante en el Departamento de Potosí ya afectó a más de 24.000 familias y posiblemente haya un riesgo alimentario para la presente gestión.
De acuerdo con los datos ofrecidos por la secretaría de Desarrollo Agropecuario de la Gobernación, a la fecha hay 34 municipios que se declararon en estado de emergencia y es necesario atender las necesidades que requieren las familias que fueron afectadas con los fenómenos climáticos.
Pero, a la vez, hay otros cinco municipios que se declararon en zona de desastre porque fueron afectados duramente por el frío y la ausencia de precipitaciones pluviales.
Los alcaldes de Tahua, Llica, Cotagaita, Colquechaca y San Pablo de Lípez emitieron esa declaratoria porque fueron los municipios más afectados por las inclemencias del tiempo.
Los datos reflejan que en el Departamento de Potosí existen 535 comunidades damnificadas por los dos eventos climáticos que se presentaron y que causaron pérdidas económicas en el sector agrícola.
No obstante, ahora, el fantasma de la inseguridad alimentaria está latente porque hay un déficit en el rendimiento productivo que se fue agravando con la llegada de los vientos fuertes y la caída de nieve en varios municipios del territorio potosino.