Los jugadores de la selección boliviana están molestos por las declaraciones que emitió César Salinas, presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), que dejó claro que a los convocados lo único que les interesa es el dinero y no el hacer una buena presentación. Ayer, el único que habló fue Diego Bejarano, que pidió a los medios dejar ese tema para después de la Copa América, que para nuestro país puede acabar el sábado, si es que no ganamos a Venezuela en el estadio Mineirao, de Belo Horizonte.
La derrota ante Perú por 3-1 hizo reaccionar al titular de la FBF, que estaba el miércoles 19 en Cochabamba, donde señaló que “Los jugadores piensan más en la billetera que en la selección”. Además, agregó que había que hacer un cambio profundo.