La cómoda victoria que conseguía Deportivo Cuenca por dos goles de diferencia se esfumó en seis minutos durante el complemento y Wilstermann pudo dejar la cuenta emparejada (2-2) la noche de ayer en el estadio “Alejandro Serrano Aguilar”, donde el cuadro ecuatoriano fue el más afectado por este resultado.
El Expreso Austral se fue al descanso con un 2-0, que en lugar de fortificar sus convicciones provocó un relajamiento entre sus jugadores y fue ahí que Wilstermann ajustó sus piezas para comenzar a aproximarse al pórtico contrario con mejor visión y alcanzó la recompensa que estaba en el otro pórtico.
El 2-2 deja esta llave abierta de la segunda fase de la Copa Sudamericana; sin embargo, la balanza parece inclinarse sobre el lado de los aviadores, porque la revancha será el 31 de julio, en Cochabamba, donde Wilstermann se hace más fuerte.
El mediocampista Juan Rojas fue el jugador que movió los engranes de Deportivo Cuenca; dio la asistencia para abrir el marcador y fue el autor del segundo tanto. Hasta ahí todo era aplausos para los dirigidos por el entrenador Richard Páez.
Rojas cedió la pelota para Jonathan De la Cruz, quien ingresó a toda velocidad y fuerza al área para conectar el centro. Pese a que el ecuatoriano estaba con marcación encima pudo definir y vencer al guardameta a los 21´.
Un pase largo, a espaldas de los defensores, dejó a Rojas de frente al arco y en la carrera pudo sacar ventaja para resolver con una puntada que el arquero Arnaldo Giménez pudo manotear y el balón fue a chocar en la base del palo izquierdo. Rojas siguió de cerca esta acción para dar el último de gracia a los 42´.
El árbitro Esteban Ostojich (Uruguay) cobró un discutido penal a favor de los rojos. Lucas de Souza se encargó de cobrar y anotar (71´) con un disparo potente de derecha. El balón chocó en la cara interna del travesaño y de ahí rebotó dentro del arco.