La dirigencia atigrada deberá rearmar el nuevo plantel de cara a la próxima temporada. La salida de Alejandro Chumacero que se marcha al Puebla, de México, además de los charrúas Luis Maldonado y Matías Alonso, el delantero Rodrigo Ramallo que se despidió ayer y sumado al posible interés de Diego Bejarano de jugar en Argentina, obligará a elegir a sus reemplazantes.
El presidente atigrado César Salinas anunció la semana pasada que al terminar el torneo Clausura (el 17 de este mes) comenzaría a develar la llegada los refuerzos. El lugar más complicado para cubrirlo será la función que cumplía Chumacero, quien se despidió de su gente en la derrota con Wilstermann.
Maldonado se reunió con la dirigencia, pero no llegó a un acuerdo.