
Independiente, de Argentina, está confiado en que se impondrá hoy a las 19:45 (hora boliviana) a Flamengo, de Brasil, que llega diezmado por las bajas del peruano Paolo Guerrero y del colombiano Orlando Berrío, en el partido de ida de la final de la Copa Sudamericana.
“Merecemos estar en la final, ahora nos queda el último paso. Me imagino levantando la Copa. Estamos muy convencidos de que lo lograremos. Hicimos un esfuerzo tremendo para llegar hasta acá y vamos a ganarla”, dijo en la víspera el centrocampista Ezequiel Barco, una de las figuras del Rojo.
Este domingo, tres días antes de la final, los hinchas de Independiente ya habían agotado las casi 50.000 entradas que el club puso a la venta.
El entrenador, Ariel Holan, dijo que Independiente debe estar tranquilo para aprovechar la oportunidad, aunque admitió que Flamengo es un equipo con grandes individualidades capaz de resolver un partido en solo dos jugadas.