Los jugadores del plantel de Bolívar retornaron a la ciudad de La Paz con la mirada puesta en Guabirá con el que jugarán el sábado en el estadio “Hernando Siles”. El pasado miércoles el celeste perdió ante Oriente Petrolero por una goleada que los dejó cabizbajos y la pena se haber sido hundidos después de mucho tiempo (5-1).
"Estamos dolidos por la derrota que tuvimos, creo que el primer gol llega por una falla nuestra y nos convierten, la expulsión de Sirino (Gastón) nos sorprendió y afectó. En cancha, el plantel de Oriente (Petrolero) se hizo fuerte y le salió todo. Cometimos errores, pero hay que levantarse prepararnos bien para mejorar, faltan dos días para ese partido", declaró el jugador Marcos Riquelme, quien no ocultó su malestar.
Los celestes saben que no tienen tiempo para los lamentos, por lo que cambiaron la página y ya piensan en el siguiente rival con el que jugarán el sábado con el objetivo de sumar o sumar.