Liga de Quito viajó ayer a Brasil con la esperanza de obtener un buen resultado en el partido del próximo jueves contra Fluminense, en su compromiso de ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana.
El campeón de la Libertadores de 2008, de la Copa Sudamericana en 2009 y de la Recopa Sudamericana en 2009 y 2010, ganó por 2-0 a Macará en la reciente jornada del campeonato ecuatoriano y logró zafarse -aunque ligeramente- de la crisis futbolística que sufre esta actual temporada.
“Este resultado nos dio tranquilidad y confianza para trabajar el partido contra el Fluminense”, indicó el técnico del equipo, el uruguayo Pablo Repetto.
Bajo su dirección el equipo esta dando muestras de un mejor funcionamiento, por lo que procurará dar la sorpresa ante Fluminense, tal como sucedió ante el uruguayo Defensor Sporting.
El cuadro quiteño estará comandado por su goleador argentino Hernán Barcos quien vuelve después de su lesión.