Roger Mariaca, luego de ser posesionado este martes como nuevo fiscal general del Estado, inicia hoy, miércoles, su mandato de seis años hasta el 2030, en Sucre, sede de sus funciones, en medio de cuestionamientos sobre su trayectoria, especialmente por su desempeño como fiscal departamental en Santa Cruz.
Mariaca fue posesionado tras ser electo el lunes con 115 votos por la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP). La ceremonia fue dirigida por David Choquehuanca, presidente nato de la ALP, y tuvo lugar en la Vicepresidencia del Estado.
En el acto de juramento hizo la señal de la cruz, agradeció a todos los asambleístas, a su familia, y manifestó su compromiso de luchar contra tres males: la corrupción, la impunidad y la violencia de género.
Durante su discurso, Mariaca destacó el honor y la responsabilidad que conlleva su nuevo rol. “Es uno de los desafíos más honrosos de mi vida. El cargo significa un compromiso inquebrantable con la justicia”, afirmó.
“Asumo este desafío con plena conciencia de los retos que enfrentamos: la corrupción, la impunidad y la violencia de género, que han dejado profundas heridas en nuestra sociedad. Sin embargo, mi compromiso es claro: lucharé con firmeza y determinación para erradicar estos flagelos que tanto daño han suscitado en nuestro país en este momento crucial para Bolivia”, dijo.
CUESTIONADO
La autoridad llega al máximo cargo del Ministerio Público en medio de cuestionamientos. Durante el proceso de selección fue impugnado por cinco ciudadanos que señalaron supuestas irregularidades en su postulación, entre ellas el incumplimiento del requisito de haber ejercido como abogado independiente por al menos ocho años.
Además, fue criticado por presuntos incumplimientos de deberes mientras ejercía como fiscal departamental en Santa Cruz, cargo al que accedió por un nombramiento del fiscal general saliente, Juan Lanchipa.
INDEPENDENCIA
El nuevo fiscal general del Estado, Roger Mariaca, dijo que el Ministerio Público no tiene que inmiscuirse en política, lo que tiene que velar es la defensa de la sociedad. “Los políticos, allá con su política, la independencia tiene que ser demostrada a la ciudadanía”, afirmó en entrevista con la red Bolivisión.
El ‘Vice’ le pide mantener el equilibrio
Tras tomarle juramento, el vicepresidente David Choquehuanca, al referirse a la misión del fiscal general, dijo que es la de “mantener la balanza en estado de perfecto equilibrio. No puede ofrecer más justicia para unos y menos justicia para otros”.
“Durante casi dos décadas del proceso de cambio en Bolivia hemos avanzado con la descolonización de los poderes del Estado, pero no lo hemos concluido. Y una de las deudas de nuestro proceso de cambio es, precisamente, con la justicia”, añadió, según publica Unitel.
También durante su discurso, el presidente nato de la Asamblea Legislativa afirmó que el objetivo del Ministerio Público es proteger a las víctimas en resguardo de las garantías constitucionales y de los derechos humanos.
“Este poder otorgado al fiscal general exige, hermano fiscal, de mucha sabiduría, conciencia de las necesidades de las partes y templanza a toda prueba para resistir las fuerzas atentatorias al principio de equilibrio”, sostuvo Choquehuanca.
El alto dignatario de Estado, además, se refirió a la necesidad de descolonizar la justicia. Además, el vicepresidente expresó que “nuestros pueblos exigen celeridad, transparencia, imparcialidad, objetividad e independencia en la administración de la justicia”.