“No se confundan, no estamos jugando, estamos dispuestos a todo. En estos momentos tenemos 1.300 efectivos en los lugares de erradicación, tanto en el Chapare como en los Yungas. Nada nos va a detener”. Así, indicó ayer el ministro de Defensa, Fernando López, durante la inauguración del plan de erradicación y racionalización de la hoja de coca excedentaria.
El ministro llamó a los cocaleros del Chapare a que hagan un alto y que se propongan liberar la zona porque sus habitantes como el resto de los bolivianos tienen los mismos derechos.
“Se están pasando de la raya”, dijo refiriéndose a quienes no quieren que las fuerzas del orden regresen al trópico de Cochabamba. Añadió que no todos los habitantes están metidos en el narcotráfico en el Chapare y que ellos son víctimas de amenazas permanentes en su propio hogar.
“Nuestros hermanos están siendo amenazados, están siendo hostigados y eso no lo podemos permitir, ojalá sus cámaras puedan retratar esa realidad”, acotó López.