
La Fiscalía de Chile difundió ayer martes detalles del macabro asesinato a la boliviana Rosalva Gómez Bejarano, cuyo cuerpo apareció atado de pies y manos y con disparo en la cabeza. Según las investigaciones, la joven manicurista quedó en medio de una pugna entre bandas de narcotraficantes y sicarios colombianos.
De acuerdo con la Fiscalía chilena, la boliviana era novia del colombiano Edwin Montaño García, conocido como el Pollo, quien pertenecía a una organización criminal dedicada al tráfico de drogas.
La banda criminal de Montaño tenía conflictos con otra organización de narcotraficantes colombianos denominada “La Familia”, que está liderada por el colombiano conocido como Tío Sam, decidió dar muerte a Montaño. Incluso ya lo habían secuestrado en julio pasado, pero logró huir.
Los investigadores chilenos interceptaron llamadas de los narcotraficantes de “La Familia”. Así descubrieron que el 28 de agosto se comunicaron entre sí para coordinar el asesinato de el Pollo.
Según la fiscal Virginia Aravena, los narcotraficantes acordaron por teléfono buscar armas y engañar a el Pollo hasta el sector de El Boro, en Alto Hospicio, donde la banda tiene varios domicilios.
Pero, cuando lograron subir a Montaño a un taxi, se dieron cuenta que iba acompañado de Gómez Bejarano. En un audio de las conversaciones de los delincuentes, queda en evidencia que los colombianos dijeron que el Pollo se subió al automóvil junto a la “hembra”.
Los miembros de “La Familia” dieron muerte al el Pollo, a quien sus familiares no han vuelto a ver desde esa fecha, y posteriormente se comunicaron para decidir qué iban a hacer con la mujer.
Según la fiscal, Gómez Bejarano estaba retenida en un local llamado “Burguer Khing” (nombre textual publicado por la Fiscalía). La boliviana estaba amarrada de pies y manos en dicho establecimiento.