El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, declaró este jueves un nuevo estado de excepción por sesenta días que incluye a la capital Quito y a seis de las veinticuatro provincias del país, así como a un municipio de una séptima provincia, para continuar el “conflicto armado interno” que a inicios de año decretó contra las bandas del crimen organizado.
Este nuevo de excepción abarca las provincias de Guayas, donde se encuentra Guayaquil, la ciudad más poblada de Ecuador; Los Ríos, El Oro, Manabí, Santa Elena y Orellana, así como el cantón (municipio) de Camilo Ponce Enríquez, un enclave minero en la provincia de Azuay donde distintas bandas criminales han buscado controlar para actividades de minería ilegal.
Estos territorios ya eran parte del anterior estado de excepción decretado por Noboa que ha estado vigente durante los últimos tres meses, con la novedad de que ahora se le suma Quito, por “el incremento de hostilidades, cometimiento de delitos e intensidad de la presencia prolongada de grupos armados organizados”, según el decreto presidencial.