
La parte de recursos humanos del Gobierno Autónomo Municipal de Potosí está sumido en el caos al extremo de que existe gente que registra su entrada a la institución y se va a su casa, pero cobra sagradamente su sueldo mensual, así se conoció a través del secretario general de la institución, Miguel Sanabria.
Durante los últimos días se estuvo revisando la estructura administrativa institucional y encontraron que algunas personas fueron contratadas como peones o albañiles, pero no están en las obras sino que se encuentran en las oficinas como apoyo administrativo.
La administración de Waldo Porcel definió que ya no se tendrá supernumerarios en las diferentes instituciones y que cada quien se desempeñe en el área para el cual fue contratada.
Sobre esa base se estableció que ya no se centrará personal supernumerario ni gente que esté cumpliendo las funciones para las cuales ya se tiene otra persona.
Actualmente se tendría más de 2.500 trabajadores en las planillas lo cual convierte a la institución en una entidad que no es muy ágil por lo cual se requiere hacer ajustes concretos en el tema de los recursos humanos.
En el caso de las personas que solo marcan el registro del día y se van a sus casas se procedió a su identificación y enviaron las denuncian a transparencia porque no se pueda cancelar alrededor de 3.800 Bolivianos sin cumplir ninguna actividad en beneficio de la población.
CÁLCULO
Calculan que alrededor de 200 personas dejarán de trabajar en la entidad, muchos de ellos tienen contratos de plazo fijo a los cuales ya se les cumplió el plazo y no habrá nuevas recontrataciones.
En una oficina que requiere de 18 funcionarios encontraron que solo 9 tenían ítems cuando en el pasado ya se había completado el cupo requerido y se evidenció que algunos de ellos fueron enviados a otras oficinas a cumplir labores para las cuales no están contratados.
Los espacios que quedaron libres habrían sido cubiertos con personas que tienen contratos por tres meses generando una fuerte desorganización en el uso de los recursos humanos.