
El piloto italiano Valentino Rossi afirmó ayer que es una “gran pena” perderse el Gran Premio de San Marino este fin de semana en el circuito Marco Simoncelli de Misano Adriático debido a su fractura de tibia y peroné, y aseguró a su afición que hará todo lo posible para regresar cuanto antes.
“Es una gran pena que no pueda estar en el GP de mi casa. Por supuesto, estaba realmente ansioso por la carrera en Misano porque correr frente a los aficionados es algo muy especial, pero tengo que tratar la lesión con cuidado”, dijo Rossi, según un comunicado publicado por Yahama MotoGP en su página web.
“Sé que el equipo me apoya en este proceso de rehabilitación. Afortunadamente, me encuentro bien y he conseguido iniciar una fisioterapia ligera”, añadió.